Un informe de la CNMV rompe una lanza por los consejeros independientes «incómodos» tras el caso Indra
Un mes después de cerrar, a medias, el escándalo del caso Indra, la Comisión Nacional del Mercado de Valores ha publicado un informe en el que se defienden cambios que permitan mantenerse en el cargo a los «consejeros independientes que puedan resultar incómodos para la dirección».
María Gutiérrez Urtiaga y Maribel Sáez Lacave, profesoras de la Universidad Autónoma de Madrid y de la Carlos III de Madrid, han publicado esta semana, en el último boletín trimestral de la CNMV, el artículo titulado Determinantes e impacto de la antigüedad de los consejeros en el cargo.
Las autoras investigan qué factores determinan la antigüedad que alcanzan los consejeros en su cargo, y los efectos que una mayor antigüedad tiene sobre el compromiso de los consejeros con las labores asignadas. Aunque se trata de una cuestión, señalan, que se ha planteado desde la preocupación por que se mantengan demasiado tiempo en el puesto «también puede resultar problemático por la situación opuesta, que los independientes no afines al CEO permanezcan demasiado poco tiempo en el cargo».
El artículo no podía ser más pertinente ni llegar en mejor momento, cuando todavía colea el escándalo vivido en el consejo de administración de Indra, la primera multinacional española tecnológica y de defensa. Aunque las profesoras universitarias emplean datos de cotizadas españolas y sus consejeros para el periodo 2013-2020, sus conclusiones podrían referirse perfectamente a lo acontecido en Indra en los dos últimos años.
El pasado mes de junio, los consejeros independientes del grupo -que se habían mostrado díscolos con la llegada del nuevo presidente, Marc Murtra, hombre cercano al PSC y que sustituyó en mayo de 2021 a Fernando Abril-Martorell, por imposición de la Sepi- fueron cesados en Junta de Accionistas, a petición del presidente del grupo Prisa, Joseph Oughourlian, en aparente concertación con la Sepi.
La CNMV investigó durante seis meses esa posible concertación entre la Sepi y Oughourlian, que de haberse demostrado obligaría a ambos accionistas a lanzar una oferta por el 100% de Indra. Los consejeros independientes cesados en Indra denunciaron concertación, como publicó este periódico.
A finales del pasado mes de diciembre, el regulador del mercado informó que había detectado «indicios de concertación», pero que no podía concluir con rotundidad que esta hubiera existido. No obstante, el organismo presidido por Rodrigo Buenaventura advirtió que el episodio vivido en Indra «se encuentra totalmente alejado de los estándares que se esperan de una sociedad cotizada».
Los consejeros independientes que tienen más probabilidad de ser reemplazados «no son los más antiguos, sino los que fueron nombrados antes que el consejero delegado», concluyen las autoras del artículo publicado esta semana por la CNMV.
En el caso de Indra, no ha sido el consejero delegado -Ignacio Mataix- el detonante de la salida de los independientes, sino la posición de la Sepi (primer accionista del grupo, con el 28% del capital) y de Oughourlian (con cerca del 10%), así como la llegada Marc Murtra a la presidencia.
Las autoras del artículo publicado por la CNMV plantean la necesidad de considerar «detenidamente» los procedimientos de nombramiento y reelección de los consejeros independientes.
«Quizás», dicen, «debería cambiarse el foco desde la limitación de la antigüedad en el cargo hacia un recambio ordenado de los consejeros independientes, que no dependa únicamente de los deseos del equipo directivo». De esta forma, se permitiría mantener en el cargo «a los consejeros independientes que puedan resultar incómodos para la dirección», concluyen.